miércoles, 24 de junio de 2009

Un poema de Isabel Bono

de los edificios
más altos

conservo la escarcha
del vértigo
fluorescentes decapitados
y conversaciones tristes
con pájaros suicidas

ningún amor

a estas alturas
mi corazón es una ciudad
sin ventanas


Isabel Bono

martes, 23 de junio de 2009

"El sacacorchos", de Alberto Clavería

Me da igual que no me quieras,
que tus miradas se diluyan en el aire
como DDT,
así están las cosas.
No voy a
jugar,
ni tan siquiera pienso
calzarme las botas
ni calentar por la banda.
Minuto noventa de partido
sin añadido.

Si para sacarte una mirada
tengo que emplear el sacacorchos
no vale la pena que me
esfuerce.

Por la Calle Mayor avanzan los tanques,
y entre bombardeo y bombardeo
no pienso escribirte nada más.

Mi último poema se lo llevará el viento,
el grito posterior la lluvia,
y a ti,
a ti te dejo lo mejor:
mi cuerpo inerte,
para que le des el digno entierro
que no supiste darle en vida.


Alberto Clavería

"Los mismos clavos", de Marea



Mi casa está donde estás tú,
los mismos ojos, la misma luz.
Mi casa está donde estás tú,
los mismos clavos, la misma cruz,
los mismos clavos, el mismo ataúd.

Marea

lunes, 22 de junio de 2009

"Negras manos", de Alberto Clavería

Mira mis manos,
sólo te pido eso.

Después de todo y antes que nada
es poco lo que te pido:
mírame las manos.

“Están negras”,
dirás,
“completamente negras”.

No te faltará razón.

Pero si están negras
es por ir cargando con tus penas
para que duermas por las noches
mientras yo me las lavo
en el fregadero
de mil ameneceres.


Alberto Clavería

"Fugazmente casi eterno", de Carlos Gutiérrez H.

Pregúntate
como afrontarías
si cada
instante
es una revelación
constante, - creedme, no sé si es mente o qué-
con su mezcla
de placer
y dolor
al 50-50,
pregúntatelo,
el mundo se
cayó a mis pies
y yo sólo
era un
observador,
disoluto y sin ego,
entonces
qué,
¿puedo?,
el fluir,
el vivir,
el sentir,
tocar
tierra
en segundos,
mejor
en cero,
debo
todo
y debo
nada,
estoy
intentando
salir
a flote
porque
estoy
perdido
en el universo,
eso sí
que duele,
buscar
el sitio,
encontrar
el sitio,
ahora
dime qué
es fácil,
te diré
que también
entra
en mi perímetro
el infinito.


Carlos Gutiérrez H.

domingo, 21 de junio de 2009

"Patio de luces", de Alberto Clavería

Los rayos de sol caen de pleno
sobre el tejado de uralita
creando una especie de
efecto invernadero
aquí en nuestro propio patio de luces
y las radios están demasiado altas y
puedo oír perfectamente
desde la ventana de la chavala
del segundo tercera
aquella canción que dice
que ese ha sido un día perfecto
bebiendo sangría en el zoo
y yo contraataco subiendo el volumen
del tronado radiocassette
justamente cuando Johnny Cash
habla del peor hotel del mundo
“joder
Johnny debe estar en la habitación de al lado”
pienso
mientras mi pelo crece
y el vino envejece
y la orquesta que una vez contraté
para que tocase en el peor día de mi vida
dobla el pasillo.


Alberto Clavería

"Es tan poco", de Mario Benedetti

Lo que conoces
es tan poco
lo que conoces
de mí
lo que conoces
son mis nubes
son mis silencios
son mis gestos
lo que conoces
es la tristeza
de mi casa vista de afuera
son los postigos de mi tristeza
el llamador de mi tristeza

Pero no sabes
nada
a lo sumo
piensas a veces
que es tan poco
lo que conozco
de ti
lo que conozco
o sea tus nubes
o tus silencios
o tus gestos
lo que conozco
es la tristeza
de tu casa vista de afuera
son los postigos de tu tristeza
el llamador de tu tristeza.
Pero no llamas.
Pero no llamo.


Mario Benedetti